Ayer celebramos de forma oficial San Valentín
Iba a venir un matrimonio amigo, pero el marido estaba super ocupado y al final no pudo venir.
Fuimos al Toni, una pizzeria de Pobla de Farnals.
Este sitio tiene un significado muy romántico para nosotros.
La primera vez que vine a Valencia, llegué por la tarde y fue la primera vez que vi a mi novio.
Me preguntó si estaba cansada. Le dije que no, y entonces me llevó a esta pizzería.
Recuerdo el sitio donde aparcó y el lugar donde cenamos. Y también recuerdo la pizza que cenamos: Una cuatro estaciones
Volvimos a recordar estos bellos momentos. Parece que fue ayer, y de esto hace 6 años y pico.
¡Caramba cómo pasa el tiempo!
Las pizzas de órdago a la grande, a la chica, a pares y a nones.
A las mujeres, por cortesía de la casa, nos dieron una cestita de productos para el baño.
La mía es verde y huele superbien, así que la he puesto en la mesilla y hace de ambientador.
A la vuelta, pasamos por el Alcampo, y no encontramos lo que fuimos a comprar, pero sí ví unas lámparas de mesilla superchulas.
Las había en blanco, negro y rojo, pero tanto a mi marido como a mí nos gustaron las rojas. Encima, superbaratas: 4 euros.
Véis también la solución a las interminables carreras por todo el pasillo cuando sonaba el teléfono: el inalámbrico, jajajaja
El mundo en mis manos
Nuestra filosofía de vida, a través de este hermoso texto
La vida es un instante que pasa y no vuelve. Comienza con un fresco amanecer; y como un atardecer sereno se nos va. De nosotros depende que el sol de nuestra vida, cuando se despida del cielo llamado “historia”, coloree con hermosos colores su despedida. Colores que sean los recuerdos bonitos que guarden de nosotros las personas que vivieron a nuestro lado.