El mundo en mis manos

Nuestra filosofía de vida, a través de este hermoso texto

La vida es un instante que pasa y no vuelve. Comienza con un fresco amanecer; y como un atardecer sereno se nos va. De nosotros depende que el sol de nuestra vida, cuando se despida del cielo llamado “historia”, coloree con hermosos colores su despedida. Colores que sean los recuerdos bonitos que guarden de nosotros las personas que vivieron a nuestro lado.

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miércoles, 17 de noviembre de 2010

La penúltima vacuna: mi chico se hace mayor

Ayer pusieron a Rafa la penúltima vacuna de su etapa de niño. Y

también le hicieron una revisión bien completita.

Está acostumbrado a que le manipulen, siempre y cuando no haya agujas de por medio. Y se hizo rápidamente amigo de la pediatra, a la que enseñó los cromos de dinosaurios. Se dejó poner el estetoscopio, que le miraran los pies y la vista y la garganta.

Luego pasamos a la sección de enfermería, donde le midieron, pesaron y tomaron nota de sus hábitos alimentarios y demás.

Mi chico se ha hecho ya mayor: Con sus 5 años ya mide 1'18 y pesa 20.4 kilos.
Yo le digo que es porque come pescado y verdura, claro.

Y llegó la hora de la vacuna. En cuanto vio las agujas, se puso histérico del todo y se quiso ocultar debajo del jersey de su papi.
Los gritos que metió hicieron que no fuera preciso hacerle una prueba de esfuerzo respiratorio. Casi deja sorda a la pobre enfermera.

Y para colmo de desdichas, fueron dos vacunas, en dos brazos, claro está. El berrinche que cogió fue de los de época. Y sudó como un cochinito. Y como cochinito se vistió de nuevo, snif, snif, y más snif.

Por el camino de vuelta se fue calmando. Y como pesa mucho, no duró mucho en brazos de su papi. Que al paso que vamos va a tener que usar el gato hidráulico para cogerlo. Mi pobre marido tiene ya los riñones al jerez de coger al ya no tan pequeño tamagochi en brazos.

En fin, que hoy al cole y nosotros al Todojuguetes a comprar los regalos de Reyes. Le hemos cogido una peonza que hace furor entre los nanos, un juego tipo Oca de dinosaurios, y un muñeco articulado tipo Madelman. Este último es regalo de la yaya.
Nos falta comprar en las Paulinas un libro con historias de la Biblia, que está muy chulo y  es ideal para los niños.

Para nosotros, nos hemos comprado en Dealxtreme (una página de internet con precios estupendísimos) un par de relojes.
Y si vendo cosicas en el mercadillo, nos haremos el último Cd de The Priests, que también nos gusta mucho.

Ya llega la Navidad, y yo, que siempre he sido muy previsora, tengo los menús ya listísmos y a falta de imprimir.
Ya he hecho la lista de lo que hay que comprar y llevo 15 días mirando las ofertas para ver si entre éstas está lo que tengo que comprar.

Vamos, que para ser de letras puras, estoy haciendo muchísimos números. Y este es mi menor quebradero de cabeza. 

En fin, que mi chico se ha hecho ya muy grande y da gloria verlo. Esto es lo más importante del mundo

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Enhorabuena para ese mayorzazo
Dile que pasara tiempo sin ponerle ninguna inyeccion Amelia

Anónimo dijo...

Ufff, tu hijo está altísimo. Eso sí, también es un bichejo, pero con muy buen corazón.

Besín.