Ya ha llegado nuestro teckel Gaspar

Os presento a Gaspar, mi teckel que llegó como regalo de mi suegra desde el cielo, ayer (ayer fue su cumple)

Estamos encantados de la vida, y es una preciosidad, tal y como véis.

Así de asustado estaba cuando lo cogí por primera vez, y a lo largo de las fotos, ya véis cómo ha espabilado

Estas fotos son de hoy, y le véis ya jugando con sus juguetes y haciendo las trastadas típicas de un cachorro de 3 meses.

La noche, la ha pasado en el dormitorio. Probamos a ponerle fuera, pero inició un concierto de aullidos y raspaduras a la puerta, y decidimos meterle dentro.




El caso es que ha dormido en la alfombra como un lirón y cuando nos hemos despertado, se ha estirado como sólo puede hacerlo un salchicha: cuan largo es, jejejej


Ahora le toca comer y ponerse fuerte, porque ha llegado un poco delgadito.

Le hemos puesto de nombre Gaspar, porque es un regalo de Reyes Magos. Luego descubrimos que también es el nombre de un político que es "rojo", jajaja

 

   

      

               

En memoria de Ikatz

 No sé cómo comenzar esta noticia triste.
Mi perra Ikatz murió el lunes pero hasta ahora no he tenido valor para poner nada.

Sirvan estas imágenes para que podáis saber como esta perra ha compartido toda nuestra vida hasta ahora y , como, ahora estamos muy solos y tristes.

La gente que no tiene perro no sabe qué tienen estos animales.
Lo he pensado mucho estos tristes días.
Soy muy egoísta, lo reconozco. Lo que me gusta de los perros, es que siempre están contentos, que siempre, cuando llego cansada a casa, me reciban meneando el rabo. Me gusta que siempre quieran jugar, que se den cuenta cuando estoy triste y me pongan el morro para consolarme

Le pregunté a mi marido que qué era para él un perro, y me contestó:  El amigo ideal. Ese que no te guarda rencor por nada, ese que siempre está a tu lado pase lo que pase. Ese que da cariño a cambio de nada. Es la fidelidad en su acepción más pura.

Esas cosas no las dan los humanos, ni siquiera los más santos. Eso sólo lo da un perro. Y por eso, ahora, estamos vacíos, tristes.

Me dicen: no es una persona. Claro, ya lo sé, hasta ahí llego, no le quiero como a una persona, le quiero como perro que es. Y por eso mi tristeza es de no tener ya a mi chuchamari conmigo.






Mi perra era un animal feliz, que sabía fruncir los morretes y era su manera de reír















Mi perra era feliz: siempre estaba contenta. Meneaba el culo porque no tenía apenas rabo. Siempre detrás de nosotros, nos esperaba contenta siempre















Se nos ha ido de repente. Un cáncer que no parecía que tenía se la ha llevado en dos días

Os dejo una selección de las fotos que le hicimos

Estas fotos son del verano, mi chucha guapa






























con mi hermano, después de bañarse en la acequia










Con la pelota, en una imagen del mes pasado

Nos preguntan si queremos otro perro. Claro que sí, pero no cocker.
Nosotros regalamos toda la camada de cockers a gente que amaba a los animales.

Ahora, nosotros necesitamos un perro, queremos un teckel hembra.

Ya sé que hay perreras, pero los perros ahí  o son grandes, o son muy pequeños, o son muy mayores. Y, al igual que no adoptamos niños con 10 años, tampoco quiero un perro mayor. Creo que es comprensible






Bueno, mi perra os felicita la Navidad en su última navidad con nosotros, es la felicitación de hace unos días