A veces el Mar Mediterráneo deja de ser ese dulce y tranquilo mar que todo el mundo conoce. Aquí tenéis dos vídeos de ayer
A mi, personalmente, me gusta más el mar bravo.
Obviamente, no había nadie en el agua. Algunos imprudentes iban mucho más allá de la prudencia para sacar fotos
Aquí se ve cómo el mar ha llegado al camino y no se podía pasar
Un viento horroroso hacía que al ir costara caminar. Las vistas lo compensaban
La Dana no nos ha afectado demasiado, a Dios gracias. Apenas ha caído lluvia por aquí
Por mi pelo, se ve el aire
Una autofoto con aire
Para compensar tan duro paseo, nos hicimos un capuchino estupendísimo.
Y este ha sido nuestro paseo ventoso