El mundo en mis manos

Nuestra filosofía de vida, a través de este hermoso texto

La vida es un instante que pasa y no vuelve. Comienza con un fresco amanecer; y como un atardecer sereno se nos va. De nosotros depende que el sol de nuestra vida, cuando se despida del cielo llamado “historia”, coloree con hermosos colores su despedida. Colores que sean los recuerdos bonitos que guarden de nosotros las personas que vivieron a nuestro lado.

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domingo, 10 de mayo de 2020

Irresponsables

Hoy domingo del que sería el útimo de la fase 0 y no es, voy a hablar de  los irresponsables que pululan por el mundo.

Hay dos que me afectan y mucho:

Los que tienen perro y no tenían que tenerlo. El dueño del que atacó a mi perro, es un tipo que no salió de los 15 años. Se conoció Faura por salir en la tele con el monopatín eléctrico y el casco de Predator.
Dice que sabe mucho de perros. Igualito que yo de física nuclear. No niego que

cuide a su perro, pero que pasa de las normas es evidente. No recoge sus excrementos, y como no hay cámara que lo plasme, él vive su vida alegre y divertida.
Su perro técnicamente no es peligroso. Pero es lo que yo digo: aunque fuera un labrador, que es el perro más pacífico del mundo, y fuera agresivo, se le pone bozal. No es el caso: es el cruce de un mastín con otro bicho.

Ayer estuvimos charlando con el amo de dos labradores y otra perrita. Y les contamos la siguiente que tuvimos paseando a Gaspar. Salió de un huerto un perro enorme cruce de pastor alemán y se fue a mi perro. Menos mal que estaba suelto mi perro. Gaspar salió corriendo como alma que lleva el diablo. El amo del otro perro, llamándolo y cagándose en todo. Al final, el otro perro dio la vuelta.
Pero resulta que este señor no es la primera vez que tiene un problema con su perro. ¡Jobar! si tu perro es agresivo, átalo, y ponle bozal.
También nos contaron los casos de dos perros más.
El tamaño sí que importa. Mi perro es agresivo, sí, lo reconozco. Pero cuando alguna vez se ha metido en un conflicto, lo cogemos y fin. Aparte, siempre vamos ojo avizor por si hay algún macho. Gaspar, cuando ve un perro, se para. Es la ventaja, que lo puedes agarrar. A ver cómo demonios agarras a un perro que pesa lo mismo que tú. Imposible.

Pasada la sección mascotas, vamos con los padres irresponsables.
Me contaba mi marido que mi vecina Amparo (la del piso de abajo, que en esta zona hay Amparos por todos lados), que en los huertos hacen botellón.


Al margen de que el hecho de beber alcohol para emborracharse sea una estupidez, el problema es que está prohibido reunirse. Sea para emborracharse o para rezar el rosario.
Esos jovencitos, tendrán padres. No entiendo cómo los padres permiten que salgan de casa. Es cierto que te pueden colar una. Pero el aliento no engaña, caramba.
Yo, personalmente, he visto grupitos de jovencitas, saliendo alegremente, con la mascarilla en la mano, y en franca amistad.
Lo de la mascarilla en la mano es igual que el casco de los motociclistas en el codo: no sirve para nada.
Yo no uso mascarillas, porque no voy a sitios llenos de gente. Cuando pasemos a la fase 1 y pueda ir a misa, me la pondré allí.
Esto es cuestión de responsabilidad. Algo que no se aprende en un cursillo