Pues si: aprovechando que un compañero llevaba su cámara de fotos, yo no saqué la mía y me dediqué a disfrutar de la procesión que cantamos.
Empezó una hora
más tarde, y el tiempo lo pasamos admirando los cinturones de los mayorales. Amablemente un mayoral nos explicó las características. Cada año hay nuevos mayorales y llevan todos un mismo cinturón bellamente bordado.
Por fin empieza la procesión y hay nervios. Los nuevos ponen cara de miedo, pero les explicamos que eso sólamente es al principio, luego va todo sobre ruedas.
Dos encantadoras mujeres, que es su primera vez, se me ponen a ambos lados para que yo, haciendo lo que más o menos sé, pueda ayudarlas.
Salimos de la ermita de la Sangre y es espectacular. Mucho gentío mirando y sacando fotos.
Es una procesión solemne en la que procuramos no hablar. Tarea difícil puesto que los tropezones están a la orden del día. El suelo es irregular y la alfombra tapa las imperfecciones que los zapatos detectan.
Y aparte, pues está la sed, el hambre, los conocidos que ves, y las canciones que hay que cantar.
Sagunto es estrechito y sonamos de cine. Tenemos experiencia en caminar y cantar a la vez.
Sale un expontáneo con un ¡Viva el Señor! que nos da un susto, y luego nos sonreímos del susto.
Quiero recoger caramelos de la Mayoralía 2010, pero cuando me decido, ya estoy anquilosada, y casi me voy de morros contra el suelo.
Disfruto del cielo estrellado y del castillo de Sagunto iluminado en la oscuridad.
El Santo Sepulcro es la única luz que hay en la calle.
Pero, las casas están abiertas, y me permiten ver bellos patios.
Llegamos casi al final, y las fuerzas justitas y cantan una saeta. Aplaudimos.
Por fin llegamos y tenemos a los mayorales descubiertos, que se arrodillan ante el Santo Sepulcro.
Meten al Santo Santo Sepulcro a la Ermita y me emociono. Aplaudimos todos
Nos colocamos en fila, y cuando vemos aparecer la Vera Cruz cantamos la última canción.
Entra la Vera Cruz, suena el himno nacional y salimos a escape al coche.
Nos espera chococalate con panquemaos (prims). El chocolate y el local lo pone el director.
El chocolate quita el cansancio, y el dulce, las agujetas.
Llego a casa a las dos y pico de la mañana. Cansada como una burra. Me tomo las pastillas de la abuela y a dormir como un tronco hasta.....Este noche pongo lo de hoy
El mundo en mis manos
Nuestra filosofía de vida, a través de este hermoso texto
La vida es un instante que pasa y no vuelve. Comienza con un fresco amanecer; y como un atardecer sereno se nos va. De nosotros depende que el sol de nuestra vida, cuando se despida del cielo llamado “historia”, coloree con hermosos colores su despedida. Colores que sean los recuerdos bonitos que guarden de nosotros las personas que vivieron a nuestro lado.
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1 comentario:
Waw! que impresionante vuetro relato,estoy maravillada!
Sabes? como son días de guardar no ando por la red...
Solo vengo a visitarte y comentarte nuevamente que me fascinó tu Shawl Blanco y el propósito para el que fué tejido ♥
Aquí en México es sábado 3 de abril y son las 11:06 de la noche...Si mal no calculo aproximadamente a ésta hora estareis estrenando vuestro Shawl ♥
Mil abrazos Amiga y que la alegría de "LA RESURECCION" habite en nuestro corazones siempre !!!
Alix
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