Excursión a Valdecuenca y Albarracín (Teruel)

 Hoy nos hemos ido de excursión con nuestros amigos a Valdecuenca y Albarracín

Valdecuenca lo conocemos de una Semana Santa en que, por estos azares del destino, descubrimos este hermoso pueblo.

Valdecuenca es un pequeño pueblo, rodeado de unos árboles llamados Sabinas albares y también con muchísimos fósiles de ammonites y demás fauna marina paleontológica. Rafa, que está obsesionado con los dinos, fue el que descubrió los más grandes.

A continuación, nos fuimos a un sendero de pequeño recorrido en el que se pueden ver pinturas de arte levantino, un mini jardín botánico y en el que hay un mirador precioso.

El arte levantino es de época neolítica. Se diferencia del arte paleolítico (el de las cuevas de bisontes y caballos, vamos) en varias cosas:

Primera y obvia: el arte levantino no se pinta en cuevas sino en abrigos rocosos, y, por tanto, está mucho más deteriorado por la erosión.

segunda: se representan escenas muy variadas: caza, recolección de miel, batallas, etc

Se representa la figura humana, en este caso un cazador hombre (con pilila y todo, jejeje), cosa que es extremadamente raro en el arte Paleolítico

Después de una pequeña subida, un mirador que siempre nos deja sin respiración. Belleza en estado puro

Sigamos con el arte levantino:

Se situa en el arco del Mediterráneo, asociado a culturas de cazadores y recolectores.

Son monócromas (un solo color) que va desde el blanco al rojo, pasando por todas las tonalidades del marrón.

Un lujo ver las pinturas, y un lujo el paseíto de hora y media.

Comimos en la zona del sendero habilitada para tal cosa. Pero empezó el viento gélido y los dedos se nos pusieron como pingüinos, así que decidimos irnos a Albarracín.

Albarracín es uno de los pueblos más bonitos que conozco.

Tiene un castillo, que estaba cerrado. Pero desde arriba las vistas eran espectaculares

Entré en calor, y me cansé, pero la vista es preciosa

Aquí se juntan mis dos especialidades: La Geografía y la Historia: formación geológica y murallas del castillo. Para chuparse los dedos, vamos

Es otoño, la estación más bonita del año, y los coloers que lucen los árboles son los más bonitos de la paleta divina.

Acabo el reportaje con la muralla del castillo recortándose en el cielo azul

Teruel tiene estos lugares encantadores. Venid y veréis que Teruel sí que existe, y que sorprende