Dos recetas y una planta nueva

Hoy os traigo un mix de receta y planta nueva, para que no os aburráis.

Primero un chopsuey de pollo y langostino, que he tomado del blog Un poco de todo.

Primero, quitamos la piel y deshuesamos unos muslos de pollo y salpimentamos. Freímos, apartamos.
En el aceite, ponemos las cabezas de 300 grs de langostinos. Freímos, apartamos.
En el aceite, ponemos una cebolla cortada finita y unas láminas de ajos. Pochamos.

Cortamos en láminas unos champis y añadimos.

Echamos las colas de langostinos y marcamos.

Ponemos todo (pollo, champis, cebolla, langostinos) en una misma cazuela. Añadimos un chorretón de vino, otro de salsa de soja y 4 ó 5 cucharadas de azúcar (yo he puesto moreno, que da más color a la salsa)




Añadimos unos guisantes y hacemos.

Espesamos la salsa con una cucharada de maizena diluida en un vaso de agua.

Rectificamos de sal si es preciso.

Buenísimo, y la salsa estupenda






Esta otra receta es una ensalada sanísima, a la que se me olvidó poner el toque final de frutos secos

Lleva: un mix de brotes (espinaca, lechuga, etc), germinado de alfalfa (que es una de las cosas más sanas del mundo), tomates cherry, queso (yo he puesto semicurado), unas bolas de melón y pipas y nueces (que se me han olvidado). Yo añadí huevo cocido.


Aliñamos con aceite, sal y vinagre de módena

Aún y así, sin los frutos secos, la ensalada estaba buenísima.

Yo no había probado nunca la alfalfa y hay que reconocer que está muy buena, aparte de dar un toque exótico a la ensalada.







Ahora, voy con la segunda parte de la entrada.

Hace tiempo, mi amiga Malena me regaló una yuca, y ha crecido mucho y está la mar de contenta en la cristalera de mi comedor.

Pero, mi idea desde hace mucho tiempo es colocar 2 plantas a ambos lados de la cristalera.

En verano, van juntas, en medio, para dejar paso, pero en invierno estará, separadas, enmarcando las puertas


Uno de nuestros pasatiempos perfectos es ir a Oasis, un hipermercado de plantas, a cotillear

Y allí, había unas cuantas plantas de interior, pero no sabíamos cuál elegir.








Preguntamos a una empleada, que fue muy agradable. Nos dijo que las drácenas son del tipo de la yuca, o sea, que necesitan los mismísimos cuidados que ella, y por tanto, son compatibles.

A nosotros nos gustaba una drácena que parecía una palmera, en tonos fosfis, pero las que quedaban eran grandes, y, a nosotros, nos gusta ver crecer las plantas.







Así que optamos por esta preciosidad que es una Dracaena massangeana.
Y le compramos una maceta haciendo juego

Las drácenas, son los famosos troncos del Brasil.

Se llaman así porque los griegos pensaban que su salvia era igual que la sangre del Dragón.. Se le atribuían propiedades medicinales.

Se sigue usando, pero no en esta especie, claro. Pero todas se llaman Dracaenas, (drácenas en castellano).

Como veís es de las plantas que parecen de plástico. Cuando a una planta natural se le dice que parece de plástico, es una alabanza. Y cuando a una planta artificial se le dice que parece natural, también es un elogio. Cosas del color.

Por la noche, la yuca parecía un puerro. Pero está chulísima. Lo que ocurre es que la otra se le come el color.

Y esto ha sido todo por hoy. Espero que os hayáis divertido
Hasta otra