Hace ya tiempo, un día os puse unas fotos del entorno en que vivo. Un sitio tranquilo.
Como tenía que sacar al perro, puse fotos de lo que se veía desde el hediendo parque.
En la misma zona, hay un descampado, que se usa como parque de perros alternativo.
Y también es usado por jovenzuelos para fumar, beber y tomar porros (hay restos luego).
En el mismo confinamiento, pasándose las normas por el arco de triunfo, se reunían.Como veis por la foto, mi dormitorio tiene vistas al parque de perros y, por ende, al parque alternativo. Y en verano, dormimos con la ventana abierta por el calor. Y
desde el dormitorio se oía el jaleo.
Es al lado del edificio blanco, que es la casa de los jubilados: Bar y demás. Ahí se reúnen para fumar porros y beber alcohol.
También sé por otras fuentes, que en otras zonas del pueblo hacían lo mismo. El Sistar, que no sé si pertenece a Faura o a Benifairó. (Son dos pueblos que están juntos y no tengo muy claro cuáles son sus límites).
Era de esperar que hubiera una segunda oleada. En España nos gusta ir de juerga nocturna. Que con las tradiciones de machos que tenemos, un virus no nos toca nuestro estilo de vida. Si nos atrevemos con un Mihura, explícanos, bichín, que nos vas a hacer.
Italia tiene fama de chapucera. Y claro, maricón el último. Pensamos los españolitos, que Italia la iba a liar parda. Pero ¿Qué hizo Italia? Toque de queda nocturno y no sale ni Cristo por la noche. Y así le van las cifras a nuestro vecinito.
Nosotros no, y así nos ha ido, ya se ve.
Hace dos semanas fuimos al Pomodoro, un restaurante muy molón en el que se come de lujo. Ya lo habíamos visto en el Arena, cuando estuvimos en San Miguel de los Reyes. Y en el Arena, se respetaban las normas de separación y de seguridad.
Así que fuimos a un Pomodoro que hay en el Epicentre, uno de los dos centros comerciales de nuestra zona.
De noche y lloviendo a jarros. Estaba petado el centro comercial. Y el Pomodoro, como si no hubiera virus. Nos asignan mesa en mitad de local. Mi marido, va a pedir. La cola, ni separación ni nada de nada. Mi marido, luchando por mantener la distancia de seguridad, y no se podía.
Al final dices: bueno, si tengo que agarrar el virus, lo agarraré y finito se acabó. No se puede luchar contra la mayoría.
Anteayer, saqué a mi perro, porque el pobre sigue con las diarreas. Y oigo un jaleo inmenso en el parque alternativo. También colaboraba otro joven que estaba en el parque de perros con su perro. A mi me hervía la sangre. De verdad. Que, a veces, mi pueblo parece la casa de Tócame Roque.
Preguntando a una conocida por su hijo, nos mentó Galileo y que su hijo estaba confinado. Yo a Galileo le conozco poco, pero resulta que es un colegio mayor de Valencia. Y a los estudiantes se le ocurrió hacer una fiesta de bienvenida a los nuevos. Resultado: confinados.
No todos los jóvenes son iguales. El movimiento Junior lo componen gente estupenda, sana, y que cumple las normas. Juniors Creu Blanca de los Valles, en mi comarca, lo llevan jóvenes que son lo mejor de lo mejor. También hay jóvenes responsables no religiosos.
Pero los amigos del botellón y del porro, no piensan igual, claro. Que les quiten lo bailao.
Y lo siguiente:¿Por qué los fumadores van por la calle tranquilos y sin mascarilla? Pienso que tendrían que fumar en su casa, no por la calle.
Esta es la semana de mi cumpleaños. El domingo veremos dónde podremos ir. La opción A es la Ciudad Encantada en Cuenca. Un sitio muy grande donde hay espacio para todos.
La opción B es irnos a Geldo, un pueblito muy cerca de casa que tiene arte urbano.
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