Como mi marido está con el GPS como un niño con zapatos nuevos, estuvo mirando centros comerciales y vió uno que no conocía: Herón.
Nos dejamos llevar por el GPS y aparecimos en Kinépolis. Un sitio conocido que le han cambiado el nombre.
Es precioso, la verdad, como véis, y total, nos alegramos de haber ido
No hay comentarios:
Publicar un comentario